20 de diciembre de 2011

meet


En una estación de tren, ella esperaba que la pase a buscar para irse muy lejos, donde no pudiese sufrir, y donde llorar sería raro. El estaba sentado en un bar, recordando la voz suave que lo despertaba todos los días, recordando el café con tostadas. Pero ya no estaba, la había dejado ir, o sola se había ido, daba igual, el caso era que, por más vueltas que le diera al asunto, nada lo solucionaría. Ella estaba viajando en un box sin compañía alguna, atenta a si se dormía, intentando leer un libro que estaba por terminar y no sabía de que se trataba. El se iba del bar derecho a su casa. Ella se despertó, notó que estaban por llegar, se bajó del tren, y tomó un colectivo. El compraba una revista en un kiosco. Ella buscaba la dirección de la pensión. El estaba abriendo la puerta. Ella estaba a su lado. El vio a una mujer. Ella vio a un hombre.